Robert Hunziker, CounterPunch.com, 15 diciembre 2023
Traducido del inglés por Sinfo Fernández
Robert Hunziker (máster en Historia Económica por la Universidad DePaul) es un escritor independiente y periodista medioambiental cuyos artículos se han traducido a varios idiomas y han aparecido en más de 50 periódicos, revistas y sitios de todo el mundo, como Z magazine, European Project on Ocean Acidification, Ecosocialism Canada, Climate Himalaya, Counterpunch, Dissident Voice, Comite Valmy y UK Progressive. Se le ha entrevistado sobre el cambio climático en Pacifica Radio, KPFK, FM90.7, Indymedia On Air y World View Show/UK.
El calentamiento global está atacando el norte de Groenlandia a la vez que los delegados de la COP28 se deshacen en elogios hacia un supuesto acuerdo histórico para la transición hacia el abandono de los combustibles fósiles, pero ¡cuidado con el verdadero significado detrás del lenguaje! Su falta de sinceridad es un sello de aprobación para muchos más trastornos climáticos que ha quedado impreso en una Conferencia más de las Partes de la ONU que no ha sido sino un fracaso.
Según la Dra. Friederike Otto, del Imperial College de Londres: «El tibio acuerdo alcanzado en la COP28 costará caro a todos los países, por ricos que sean y por pobres que sean. Todos pierden. Se considera un compromiso, pero hay que tener muy claro qué es lo que se ha comprometido. Los intereses financieros a corto plazo de unos pocos se han impuesto de nuevo a la salud, las vidas y los medios de subsistencia de la mayoría de las personas que viven en este planeta». (COP28: Landmark Deal to Transition Away from Fossil Fuels Agreed- As It Happened, The Guardian, 13 de diciembre de 2023)
La publicación de Down to Earth del 14 de diciembre de 2023 dio en el clavo respecto a la COP28: «A pesar del verano más caluroso de los últimos 120.000 años, las empresas petroleras, gasísticas, carboneras y agrícolas que están calentando el planeta pueden seguir ampliando la producción en un futuro próximo».
Mientras tanto, una nueva investigación ha identificado problemas muy preocupantes en Groenlandia: Tres de las ocho principales plataformas de hielo de la región septentrional se han hundido o retrocedido, dejando cinco plataformas de hielo como gigantescos corchos que impiden que los principales glaciares fluyan rápidamente hacia el mar, elevando a su vez el nivel del mar más allá de lo tolerable. Los tres más grandes son Petermann, Ryder y Nioghalvfierbrae. Este trío por sí solo equivale a 110 centímetros de aumento del nivel del mar (Fuente: Alarming Collapse of Greenland Ice Shelves Sparks Warning of Sea Level Rise, LiveScience, noviembre de 2023).
Según otro estudio del Instituto Oden de Ingeniería y Ciencias Computacionales de la Universidad de Texas, los glaciares de Groenlandia se derriten 100 veces más rápido de lo que se pensaba. (Fuente: K Schulz, et al, An Improved and Observationally Constrained Melt Rate Parameterization for Vertical Ice Fronts of Marine Terminating Glaciers, Geophysical Research Letters, Vol. 49, Nº 18, 20 de septiembre de 2022).
Además, según el estudio de Oden «El deshielo de la capa de hielo de Groenlandia es un importante factor de predicción del aumento del nivel del mar. Esta extensión helada de glaciares es la segunda más grande de la Tierra y cubre cerca del 80% de la nación nórdica. Si se derritiera por completo, como ocurrió en el punto álgido del periodo interglaciar Eemian hace unos 125.000 años, el nivel global del mar podría aumentar 6,1 metros».
Un deshielo completo llevaría siglos, pero sólo nos preocupan los primeros metros, que probablemente ocurrirán en este siglo XXI, los suficientes como para inundar ciudades costeras, por ejemplo, acabarían con Miami Beach, a menos que Florida rodee todo el estado con un gigantesco dique creando un foso medieval ciudad/estado.
Desde que se tiene memoria, las ocho plataformas de hielo de la región septentrional de Groenlandia siempre se mantuvieron estables. Sin embargo, tal estabilidad se ha desintegrado repentinamente, según el informe: «Demostramos que, desde 1978, las plataformas de hielo del norte de Groenlandia han perdido más del 35% de su volumen total, y tres de ellas se han derrumbado por completo. En las plataformas de hielo flotante que quedan observamos un aumento generalizado de las pérdidas de masa de las plataformas de hielo». (Fuente: R. Millan, et al, Rapid Disintegration and Weakening of Ice Shelves in North Greenland, Nature Communications, noviembre de 2023)
No hace falta insistir para saber que el compromiso ecológico de la COP28 y la amenaza del calentamiento global para Groenlandia no sólo están interrelacionados, sino que son realmente malas noticias. Y, una vez más, deja al descubierto la vacuidad de la Conferencia de las Partes (COP) anual de la ONU que debería abordar la imperiosa cuestión de las excesivas emisiones de CO2 que crean un manto que atrapa el calor global. Ipso facto, los glaciares de Groenlandia, 100 veces más rápido, empiezan a llenar los océanos. Esto, a su vez, crea el misterio de todos los misterios, ya que nadie sabe a qué altura, o cuándo, el aumento del nivel del mar abrumará a las metrópolis costeras. Pero si nos basamos en la debilidad de más de 30 años de reuniones de la COP a las que asisten líderes mundiales (154 jefes de Estado en la COP28), el panorama parece desolador.
Entre las plataformas de hielo referenciadas, la plataforma de hielo Peterman es un punto focal. Se encuentra en el extremo marino de un profundo cañón de subhielo que podría abrir la penetración del océano en el centro de toda la capa de hielo de Groenlandia. El paso inicial hacia tan horrible perspectiva sería la pérdida de la plataforma de hielo de Peterman.
«Las plataformas de hielo son las partes de una capa de hielo que flotan sobre el agua, impidiendo que los glaciares de la tierra se deslicen hacia el océano y se fundan en él, lo que aumentaría el nivel del mar. Si los glaciares que sostienen las plataformas de hielo del norte de Groenlandia se derrumbaran, el nivel del mar podría subir casi 2,1 metros.» (Informe de LiveScience)
Por lo tanto, el análisis científico de Millan debería llamar la atención de los responsables políticos sobre la necesidad de adoptar medidas de mitigación inmediatas y contundentes, y no compromisos a medias que se difunden como «hitos», ¡por favor! Sin embargo, en la 28ª conferencia anual de la ONU sobre el clima, celebrada recientemente en Dubai, no se abordó la cuestión de las emisiones excesivas de CO2 que provocan un aumento del calentamiento, sino que se hizo hincapié en la «transición» hacia el abandono de los combustibles fósiles. Este enfoque, que no ha funcionado en más de 30 años de reuniones de la COP, hace que reine la frustración. Según el presidente de la COP, Al-Jaber, la COP28 es una «verdadera victoria», pero «sus comentarios chocan con las reacciones de los científicos que han alabado partes del consenso de EAU pero han criticado su lenguaje vago, débil y lleno de advertencias sobre los combustibles fósiles, que son la principal causa del cambio climático». (The Guardian, 13 de diciembre)
Como resultado de décadas de COP débiles, hay un precio a pagar: «Nos dirigimos hacia un Hemisferio Norte sin plataformas de hielo» (Millan). Las implicaciones son horrendas e imposibles de describir y, basándonos en los resultados de la COP28, una de las principales preguntas de cara al futuro es si se podrán erigir medidas de adaptación, como altos diques, antes de que suba el nivel del mar.
Científicos de Francia, EE. UU. y Dinamarca han estudiado en detalle las consecuencias de la entrada de demasiado calor oceánico (los océanos absorben entre el 80 y el 90% del calor planetario) bajo las plataformas de hielo, utilizando datos de satélite, observaciones oceánicas y modelos climáticos para medir los cambios en la superficie y el grosor de las plataformas de hielo. Se han revaluado las líneas de encallamiento de las plataformas de hielo. Las zonas donde terminan las plataformas flotantes y comienzan los glaciares encallados están retrocediendo hacia el interior en casi todas las plataformas, un signo clave de debilitamiento. Este es un excelente ejemplo de cómo actúa la némesis del calentamiento global alimentado por el aumento de las emisiones de CO2. Se suponía que la COP28 iba a tratar cuestiones como ésta. Pero no fue así.
Como se mencionó anteriormente, a partir de 2002, el deshielo de la plataforma de hielo de Groenlandia ha sido 100 veces más rápido de lo esperado por los científicos. Es literalmente imposible conducir un coche 100 veces más rápido que la velocidad de crucero; físicamente no se puede hacer; sin embargo, enormes plataformas de hielo se están derritiendo 100 veces más rápido. Es algo en lo que pensar.
Imagen de portada: Casas cerca de la colina bajo el cielo nublado, Ittoqqortoormiit, Groenlandia (Annie Spratt).
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