Abir Ayub, Middle East Eye, 8 marzo 2024
Traducido del inglés por Sinfo Fernández

Abir Ayub es una periodista palestina de Gaza. Estuvo trabajando en la Franja como freelance durante cinco años, antes de trasladarse al Reino Unido con una beca académica de la Universidad de Oxford. Actualmente reside en Ammán, donde cursa un máster en nuevos medios de comunicación.
Mientras el mundo celebra hoy el Día Internacional de la Mujer, cientos de miles de mujeres palestinas siguen enfrentándose a un destino letal en medio de la continua guerra de Israel contra Gaza.
De las más de 30.000 personas que han muerto hasta ahora, 9.000 son mujeres. Además, las mujeres representan el 75% de los 72.156 heridos, según datos de la Oficina Central Palestina de Estadística.
Las que han sobrevivido se enfrentan al desplazamiento, la escasez de bienes de primera necesidad, las responsabilidades del cuidado de los hijos y la falta de acceso a servicios de salud sexual y reproductiva.
Según la ONG internacional ActionAid, Gaza se ha convertido en uno de los entornos más peligrosos para mujeres y niñas, que sufren «niveles de violencia sin precedentes». Según los informes, cada hora mueren asesinadas más de tres mujeres y niñas.
«Para ellas, cada día es una lucha desesperada por satisfacer sus necesidades más básicas. Durante meses, esta pesadilla se ha prolongado, dejando a las mujeres y niñas de Gaza preguntándose por qué el mundo las ha abandonado», ha declarado Riham Yafari, coordinadora de comunicación y defensa de ActionAid Palestine.
Las mujeres de Gaza se han quejado de la ausencia de compresas en los paquetes de ayuda humanitaria. En consecuencia, algunas mujeres recurrieron a cortar pañales de bebé para utilizarlos como compresas improvisadas durante sus periodos menstruales. Otras mencionaron el uso de trozos de tela como alternativa.
Recientemente, un grupo de mujeres de Rafah, en el sur de Gaza, puso en marcha un taller en el que cosen compresas con retales de tiendas de campaña que les proporcionan las organizaciones humanitarias.
Madres que sufren
Según Naciones Unidas, había unas 50.000 mujeres embarazadas en el enclave, ya asediado, cuando empezó la guerra. Según los informes, unas 183 mujeres dan a luz cada día, y el 15% de ellas sufre algún tipo de complicación.
La organización benéfica británica Oxfam ha observado también un aumento de casi el 30% de partos prematuros entre las mujeres, atribuido al estrés y los traumas. Algunas mujeres optaron por abortar por miedo, lo que provocó un aumento del 300% de los casos de aborto, según la agencia humanitaria internacional Care.
En medio del hambre, la hostilidad y la amenaza de muerte y enfermedad, se han dado casos de mujeres que han dado a luz sin asistencia médica.
Las mujeres daban a luz en tiendas de campaña, mientras que otras daban a luz en aseos con la ayuda de otras mujeres sin formación. Los informes describen a mujeres de Gaza sometidas a cesáreas sin anestesia.
Las mujeres embarazadas ya no tienen acceso a los servicios sanitarios. Dicen que dependen del movimiento de sus bebés nonatos dentro del útero para asegurarse de que siguen vivos. No tienen acceso a las vitaminas y minerales esenciales ni a los medicamentos necesarios.
La ONU afirma que el número de hogares encabezados por mujeres viudas a las que se ha encomendado la responsabilidad exclusiva de alimentar, salvaguardar y mantener a sus familias puede haber aumentado significativamente en unas 3.000 personas.
Este aumento se atribuye a la pérdida de hombres en toda Gaza debido a los asesinatos de Israel, lo que también puede haber provocado que aproximadamente 10.000 niños se hayan visto privados de sus padres. Euro-Med Human Rights Monitor ha informado de que más de 24.000 niños pueden haber perdido a sus padres.
Violaciones de los derechos humanos
El mes pasado, expertos de la ONU expresaron su alarma por informes fidedignos sobre graves violaciones de los derechos humanos sufridas por mujeres y niñas palestinas en la Franja de Gaza y Cisjordania.
«Estamos consternados por los informes de ataques deliberados y ejecuciones extrajudiciales de mujeres y niños palestinos en lugares donde buscaban refugio o mientras huían. Según los informes, algunos de ellos sostenían trozos de tela blanca cuando el ejército israelí o fuerzas afiliadas los mataron», afirmaron los expertos.
El informe pasó desapercibido para los medios de comunicación internacionales, que el 7 de octubre destacaron en numerosas ocasiones las denuncias de abusos sexuales contra mujeres israelíes, incluso antes de que la ONU publicara su informe sobre el caso.
Una mujer palestina contó a este periodista que un soldado israelí la amenazó con violarla si se resistía a su detención arbitraria. De camino a la prisión de Damon, en Haifa, la mujer dijo que fue sometida a palizas y humillaciones mientras estaba esposada.
«Mis padres me pidieron que no dijera que me habían amenazado de violación porque es tabú en nuestra sociedad», explicó.
Las mujeres de Gaza afirman que los constantes bombardeos han dejado traumatizados a sus hijos y que tienen que hacer frente a muchas cargas añadidas desde que comenzó la guerra.
Foto de portada: Mujeres palestinas desplazadas cuidan de sus hijos en una tienda de campaña en Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, el 7 de marzo de 2024, en vísperas del Día Internacional de la Mujer, en medio de los continuos bombardeos israelíes (Mohammed Abed/AFP).