Nuevos datos revelan que, desde el 7 de octubre, al menos 98 palestinos han muerto bajo custodia israelí

Yuval Abraham, +972.com Magazine y Local Call , 17 noviembre 2025

Traducido del inglés por Sinfo Fernández


Yuval Abraham es un periodista y cineasta afincado en Jerusalén.

Al menos 98 palestinos han fallecido en las prisiones y centros de detención militares israelíes desde el 7 de octubre de 2023, en muchos de los casos como consecuencia directa, según parece, de torturas, negligencia médica y privación de alimentos por parte de los soldados y funcionarios de prisiones. De los detenidos procedentes de Gaza, que constituyen la mayoría, menos de un tercio fueron clasificados por el propio ejército israelí como militantes, lo que significa que Israel fue responsable de la muerte de decenas de civiles palestinos bajo custodia.

Los datos sobre las muertes de palestinos en prisión, que no se habían publicado anteriormente, fueron obtenidos del ejército israelí y del Servicio Penitenciario de Israel (IPS, por sus siglas en inglés) por Médicos por los Derechos Humanos-Israel (PHRI, por sus siglas en inglés), que ha publicado hoy un informe en el que se dan a conocer estas cifras. Según PHRI, es probable que la cifra de 98 sea muy inferior a la real, ya que los grupos de derechos humanos no han podido localizar a otros cientos de personas que, según se informa, fueron detenidas en Gaza.

Las revistas +972 Magazine, Local Call y The Guardian cotejaron los datos de PHRI con una base de datos interna de la inteligencia militar israelí, filtrada a las publicaciones a principios de este año, para determinar cuántos de los detenidos fallecidos de Gaza consideraba el ejército que pertenecían a las ramas militares de Hamás o la Yihad Islámica Palestina. (La base de datos no contiene información sobre miembros de otros grupos armados de Gaza, que según los informes del IPS representan menos del 2% de todos los detenidos del enclave desde el 7 de octubre).

Datos obtenidos por PHRI revelan que al menos 68 prisioneros de Gaza murieron bajo custodia israelí hasta finales de agosto. La base de datos de inteligencia —cuyos datos obtuvimos en mayo y que, según diversas fuentes de inteligencia israelíes, el ejército considera la fuente de información más completa sobre militantes palestinos en Gaza— registraba 21 militantes fallecidos bajo custodia israelí desde el inicio de la guerra. En ese momento, se sabía que 65 prisioneros de Gaza habían muerto en prisiones y centros de detención israelíes, lo que sugiere que hasta 44 de los detenidos gazatíes fallecidos eran civiles.

+972, Local Call y The Guardian habían revelado anteriormente que la base de datos interna del ejército indica que los civiles representaban el 83% de todos los fallecidos en Gaza, así como las tres cuartas partes de los arrestados y detenidos.

Además de los 68 gazatíes, PHRI informa que 23 palestinos de Cisjordania y tres con ciudadanía o residencia israelí murieron bajo custodia israelí durante la guerra, antes de agosto de este año, sumando un total de 94 detenidos. Desde entonces, al menos cuatro palestinos más han muerto bajo custodia —tres de Cisjordania y uno de Gaza— elevando el número total de muertos conocidos a 98. (Esto no incluye siete casos más en los que palestinos fueron alcanzados por disparos del ejército y murieron bajo custodia poco después de ser detenidos antes de llegar a las instalaciones penitenciarias).

Funcionarios del Servicio Penitenciario de Israel preparan a prisioneros palestinos para su liberación como parte de un acuerdo de rehenes entre Israel y Hamás, en la prisión de Kteziot, al sur de Israel, el 26 de febrero de 2025. (Chaim Goldberg/Flash90)

Esta cifra es considerablemente mayor de lo que se pensaba anteriormente. Los datos más recientes, publicados a principios de noviembre por tres organizaciones palestinas de defensa de los derechos de los presos (Addameer, la Comisión de Asuntos de Detenidos y Exdetenidos y la Sociedad de Presos Palestinos), cifran en 81 el número de detenidos fallecidos en prisiones y centros de detención israelíes durante los últimos dos años.

Entre 1967 y octubre de 2023, según Amani Sarahneh, de la Sociedad de Presos Palestinos, el número total de palestinos fallecidos bajo custodia israelí fue de 237. Si bien la documentación durante los primeros años de la ocupación israelí de Cisjordania y Gaza fue contradictoria, el número de muertes entre los presos y detenidos palestinos en los últimos dos años representa una escalada alarmante, que refleja cómo la violencia física, la tortura y otros abusos contra los palestinos se han normalizado en el sistema penitenciario israelí durante la guerra.

No obstante, PHRI señala que la cifra de 98 probablemente sea un subregistro significativo. “Esto no refleja la realidad completa”, explicó Naji Abbas, director del Departamento de Prisioneros y Detenidos de la organización. “Estamos seguros de que todavía hay personas que murieron en detención de las que no tenemos conocimiento”.

El ejército israelí proporcionó por última vez datos sobre detenidos fallecidos en centros de detención militar en mayo de 2024, junto con datos equivalentes publicados por el IPS acerca de las prisiones. En ese momento, el número total de fallecidos en ambos tipos de instalaciones era de 60; esto significa que la tasa de muertes de detenidos palestinos bajo custodia israelí durante los primeros ocho meses de la guerra fue de aproximadamente uno cada cuatro días. Cuatro meses después, el IPS declaró, en respuesta a una solicitud de acceso a la información, que otros tres detenidos habían fallecido en prisiones israelíes.

Desde septiembre de 2024, sólo se ha recibido información adicional sobre muertes de palestinos bajo custodia israelí en respuesta a consultas específicas sobre detenidos individuales: es decir, el ejército y el IPS confirmaron muertes concretas cuando se les preguntó, pero no proporcionaron datos por iniciativa propia.

Mientras tanto, se desconoce la suerte de muchos más palestinos que, según informaciones, fueron detenidos por soldados israelíes en Gaza. El ejército ha comunicado al grupo israelí de derechos humanos HaMoked que no tiene información sobre cientos de palestinos que, según dicha organización, fueron detenidos por sus fuerzas. En el pasado, el ejército aseguró a organizaciones de derechos humanos que ciertas personas no estaban bajo custodia israelí, para luego informar, en respuesta a procesos judiciales, que habían fallecido.

Las familias en Gaza no reciben notificación oficial de la muerte de sus familiares bajo detención israelí y suelen enterarse a través de los medios de comunicación. Datos proporcionados por el Estado a PHRI indican que se desconoce la identidad de al menos 18 gazatíes fallecidos en prisiones israelíes, y que a sus familias no les fue notificada su muerte.

Guardias de prisiones israelíes, grabados en un video filtrado violando a un detenido palestino en el centro de detención de Sde Teiman, comparecen ante la prensa junto a su abogado tras la renuncia de la abogada general militar, la mayor general Yifat Tomer-Yerushalmi, frente al Tribunal Supremo de Jerusalén, el 2 de noviembre de 2025. (Yonatan Sindel/Flash90)

A pesar de casi 100 muertes registradas bajo custodia y abundantes testimonios y otras pruebas de graves abusos físicos -incluida la violencia sexual generalizada, documentada en un contundente informe del Centro Palestino para los Derechos Humanos, con sede en Gaza-, sólo un soldado israelí ha sido procesado; en febrero fue condenado a siete meses de prisión por agredir a detenidos de Gaza. Otros cinco soldados han sido acusados ​​de violación y de causar lesiones graves a un detenido en el centro de detención de Sde Teiman, después de que el video se filtrara a los medios israelíes el año pasado.

Como informa Haaretz, el máximo responsable jurídico del ejército israelí evitó deliberadamente iniciar investigaciones sobre presuntos crímenes de guerra cometidos por soldados israelíes, incluyendo los relacionados con la muerte de detenidos bajo custodia, debido a la anticipada oposición de la derecha.

«No se han presentado cargos por ningún caso de asesinato», explicó Abbas. «No se trata de casos aislados. Es un problema sistémico que continuará».

Según datos obtenidos por PHRI, Sde Teiman ha sido el centro de detención más letal, con 29 palestinos fallecidos desde el 7 de octubre. Al menos dos detenidos más murieron en el campo de Ofer (donde +972 denunció graves abusos, descargas eléctricas y propagación desenfrenada de enfermedades), al menos uno en el campo de Anatot y al menos siete más en diversos centros de detención militares en el sur de Israel. Cinco fallecieron en el Hospital Soroka, tras ser trasladados desde centros de detención militares mientras aún estaban detenidos.

En cuanto a las cárceles formales administradas por el IPS, al menos 16 detenidos murieron en la prisión de Ketziot, al menos cinco en la prisión de Ofer, al menos seis en la prisión de Nitzan y el Centro Médico del IPS (Marash), siete en la prisión de Megiddo, cuatro en el complejo que comprende las prisiones de Nafha y Ramon, al menos uno en la prisión de Eshel, al menos tres en la prisión de Kishon y tres más en la prisión de Shikma. Se desconoce el lugar de la muerte de otros ocho.

“Todas las noches oíamos cómo golpeaban a los presos hasta matarlos”

+972, Local Call y The Guardian analizaron 10 informes de autopsia de palestinos fallecidos bajo custodia israelí, redactados por médicos que asistieron a las autopsias en representación de las familias de los fallecidos. En cinco de ellos, se encontraron indicios de violencia como posible causa de muerte: múltiples costillas rotas, hematomas en la piel o cerca de órganos internos y desgarros en órganos internos. Al menos tres muertes fueron consecuencia directa de negligencia, incluyendo un caso de desnutrición extrema, un caso de leucemia sin tratar y un caso en el que a un detenido diabético se le privó de insulina.

Omar Daraghmeh, de 58 años, falleció en la prisión de Megido en octubre de 2023. Una tomografía computarizada realizada tras la autopsia reveló una hemorragia masiva en la zona abdominal, lo que suscitó sospechas de que su muerte se debió a una agresión física o a una caída desde una altura considerable.

La autopsia de Abdel Rahman Mara’i, de 33 años, quien falleció en la misma prisión al mes siguiente, también reveló signos de violencia: presentaba fracturas de costillas y esternón, además de hematomas por todo el cuerpo. El médico forense que realizó la autopsia de Mara’i atribuyó su muerte a la violencia sufrida.

Funcionarios del Servicio Penitenciario de Israel preparan a prisioneros palestinos para su liberación como parte de un acuerdo de rehenes entre Israel y Hamás, en la prisión de Kteziot, al sur de Israel, el 26 de febrero de 2025. (Chaim Goldberg/Flash90)

Un detenido que compartía celda con Mara’i declaró a PHRI: “Unos 15 funcionarios [de la prisión] lo atacaron, todos de pie a su alrededor, golpeándolo brutalmente. Los golpes duraron unos cinco minutos y se centraron en su cabeza”.

Sari Hurriyah, un abogado palestino con ciudadanía israelí que fue detenido al mismo tiempo que Mara’i por sus publicaciones en Facebook, declaró al Channel 13 de Israel que presenció la muerte de Mara’i en la celda contigua. “Todas las noches, oíamos los gritos de quienes golpeaban hasta matarlos”, dijo Hurriyah.

Según el testimonio de Hurriyah, Mara’i gritó durante horas después de la agresión: “Estoy enfermo, me duele, no puedo respirar, ¡tráiganme un médico!”. Pero los guardias simplemente entraron en su celda y le ordenaron que se callara, según declaró Hurriyah. Al día siguiente, dejó de hablar; los guardias se dieron cuenta de que había fallecido y lo sacaron de la celda “en una bolsa negra de basura”.

Abdel Rahman Bahash, de 23 años, murió en la prisión de Megido en enero de 2024. Su informe de autopsia reveló múltiples fracturas de costillas, una lesión en el bazo, inflamación y desgarros pulmonares. Una posible causa de la muerte fue la insuficiencia respiratoria debido a una lesión pulmonar. Un compañero de celda informó que los guardias habían agredido a Bahash, tras lo cual se quejó de dolor en el pecho y las costillas, pero se le negó atención médica. Cuando ya no pudo mantenerse en pie, los guardias se lo llevaron y falleció unos días después.

Walid Khaled Abdullah Ahmed, de 17 años, falleció en la prisión de Megiddo en marzo de 2025. Un médico presente en la autopsia informó que prácticamente carecía de masa grasa y muscular, y que además padecía diarrea y sarna, lo que generó la sospecha de que murió de inanición. Su padre declaró a Haaretz: “En las audiencias judiciales pude ver que el chico estaba muy delgado, con el rostro demacrado, como otros detenidos que sufren desnutrición en las cárceles”. Según su padre, Ahmed no tenía antecedentes de enfermedades.

Arafat Hamdan, de 25 años, falleció en la prisión de Ofer en octubre de 2023. Padecía diabetes tipo 1, y un detenido que estaba con él afirmó que murió por negligencia: su estado empeoró gradualmente hasta que dejó de comer mientras sufría desmayos intermitentes.

«Llamamos al médico de nuevo para que lo revisara, y nos dijo que lo llamáramos cuando Arafat falleciera», recordó el detenido en un reportaje de B’Tselem. Tras hora y media, vimos que le salía líquido de la boca. Uno de los detenidos le tomó el pulso y gritó que Arafat había muerto.

Mohammed Al-Zabar, de 21 años, falleció en la prisión de Ofer en febrero de 2024. Desde niño padecía una enfermedad intestinal y requería nutrición especializada. El informe de la autopsia indicó que murió por falta de la nutrición necesaria, lo que le provocó un estreñimiento prolongado que no recibió atención médica.

Palestinos esposados ​​son obligados a sentarse frente a una imagen de la destrucción causada por la ofensiva israelí en la Franja de Gaza y una bandera israelí, en una prisión del centro de Israel, el 6 de mayo de 2025. (Chaim Goldberg/Flash90)

Thaer Abu Asab, de 38 años, fue asesinado a golpes en la prisión de Ketziot en noviembre de 2023, según testimonios de otros reclusos. Uno de ellos declaró a B’Tselem que las fuerzas especiales irrumpieron en la celda y comenzaron a golpear a todos los internos con porras por todo el cuerpo hasta que sangraron por la cabeza. «A Thaer lo golpearon con más fuerza», relató. «Intentó protegerse la cabeza con las manos, pero pronto tuvo que quitarlas por los golpes».

Tras la marcha de los guardias, Abu Asab permaneció en el suelo, sangrando e inconsciente. El recluso afirmó que intentaron llamar a un guardia durante más de una hora, pero nadie acudió. Finalmente, Abu Asab fue sacado de la celda y los guardias informaron a los demás reclusos de su fallecimiento.

Al día siguiente, continuó el detenido, el Shin Bet (la agencia de seguridad interna de Israel) interrogó uno por uno a todos los presos que estaban detenidos con Abu Asab y “afirmaron que éramos nosotros quienes habíamos causado disturbios y matado a Thaer, por ese motivo todos estábamos heridos. Dijeron que fuimos nosotros quienes nos atacamos entre nosotros, no los guardias… Dijo que habíamos matado a Thaer y que queríamos incriminar a la prisión”.

El Servicio de Prisiones de Israel (IPS) se negó a responder a la consulta detallada de +972 sobre las muertes mencionadas en nuestro informe, remitiéndonos en cambio al Coordinador de Actividades Gubernamentales en los Territorios (COGAT) porque “COGAT es responsable de los palestinos detenidos que no han sido condenados”. COGAT declaró a +972 que el tema de las muertes bajo custodia no es de su competencia.

Foto de portada: El servicio penitenciario israelí prepara a los prisioneros palestinos para su liberación como parte de un acuerdo de rehenes entre Israel y Hamás, en la prisión de Kteziot, sur de Israel, 26 de febrero de 2025 (Chaim Goldberg/Flash90).

Voces del Mundo

Deja un comentario